lunes, junio 30, 2025

Grupo Peñafiel avanza en su compromiso con la gestión responsable de residuos

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  • Las plantas de Tehuacán y Tecámac de Grupo Peñafiel avanzan en su gestión de residuos.
  • En 2024, reutilizaron hasta el 60% y 48% de sus desechos, respectivamente. Tehuacán busca ser “Zero Waste to Landfill” para 2025.
  • Estas acciones refuerzan su compromiso sostenible y liderazgo en economía circular.

En el panorama actual, la gestión responsable de residuos se ha convertido en un pilar fundamental para las empresas comprometidas con la sostenibilidad. En este contexto, dos plantas de producción en México han demostrado avances notables en sus estrategias de manejo de desechos, sentando un precedente importante en la industria de bebidas.

Compromiso con la economía circular

Durante 2024, la planta de Tehuacán, Puebla, y la planta de Tecámac, Estado de México, reportaron cifras destacadas en la reutilización y el reciclaje de sus residuos. La planta de Tehuacán logró reutilizar hasta el 60% de sus residuos, mientras que más del 28% fue reciclado. Por su parte, la planta de Tecámac reportó un 48% de materiales reutilizados. Estas acciones reflejan un compromiso firme con la economía circular, buscando maximizar el valor de los materiales y reducir la dependencia de recursos vírgenes.

La planta de Tehuacán tiene una meta ambiciosa para 2025: convertirse en la primera del grupo en alcanzar la categoría de “Zero Waste to Landfill”, lo que significa que no enviará residuos a rellenos sanitarios. En 2024, esta planta generó aproximadamente 321 toneladas de residuos al mes, de los cuales más del 98% fueron reciclados, reutilizados o transformados de manera responsable. Como resultado, solo el 0.5% de los residuos generados se destinaron a rellenos sanitarios.

La planta de Tecámac, que produce alrededor de 72 toneladas mensuales, logró una tasa de reutilización del 48%. Además, cuenta con la certificación de “Industria Limpia” nivel dos, otorgada por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA). Esta certificación valida un sistema y controles para la mejora anual en indicadores relacionados con suelo, agua, aire, residuos y control de riesgos ambientales.

Iniciativas implementadas y resultados específicos

Ambas plantas han implementado diversas iniciativas innovadoras para optimizar su gestión de residuos.

Planta Tehuacán

En la Planta Tehuacán, los resultados de 2024 muestran que el 60% de los residuos se reutilizaron y el 28% se reciclaron. Un 10% de los lodos industriales se transformaron en fertilizante orgánico, mientras que el 1.5% de los residuos sólidos urbanos se destinaron a coprocesamiento energético. Solo el 0.5% se envió a relleno sanitario. Entre las iniciativas implementadas se encuentran la conversión del 100% de los lodos de la planta tratadora en abono orgánico, la reutilización de tarimas mediante reparación en planta, el uso de 37% de resina reciclada en envases PET y la sustitución de contenedores de cartón por alternativas metálicas reutilizables.

Planta Tecámac

Por su parte, la Planta Tecámac en 2024 reportó un 48% de residuos reutilizados, un 28% reciclados y un 12% destinados a coprocesamiento. El 12% restante se envió a relleno sanitario. Entre sus acciones destacan la disposición de lodos en terrenos de cultivo, lo que ha incrementado la tasa de reciclaje y reutilización de sus residuos entre un 40% y un 70%, y el coprocesamiento de residuos como madera, sanitarios y orgánicos.

Un esfuerzo colaborativo con impacto positivo

Ambas plantas poseen la certificación ISO 14001:2015 de sistema de gestión ambiental. La gestión de residuos se lleva a cabo en colaboración con empresas certificadas, lo que asegura un manejo profesional y responsable.

Estos esfuerzos no solo optimizan las operaciones internas, sino que también generan un impacto ambiental y social positivo. La transformación de residuos en insumos como fertilizantes, empaques o materiales reciclados reduce la presión sobre los ecosistemas, apoya la economía circular local y promueve una cultura de aprovechamiento de recursos en diversas industrias. Se trata de un paso hacia un futuro más responsable, demostrando que la industria puede liderar el cambio ambiental a través de acciones medibles y comprometidas.

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